Uno de mis amigos es un poco hippie y no le gusta comer un montón de cosas de las cuales no está seguro de lo que llevan. Su última novedad es que ahora solamente puede desayunar Leche semidesnatada Ecológica mezclada con su muesly. A mi me parece una tontería porque que ahora se preocupe de lo que come es un sinsentido, ya que cuando éramos niños, ambos los fines de semana nos comprábamos una pizza para cada uno y un par de tabletas de chocolate y nos las comíamos. Así que ahora me parece que llega un poco tarde para preocuparse. Pero al vivir en un pueblo de hippies es normal que le hayan comido un poco la cabeza, esos son los riesgos de estar siempre rodeado de gente diferente al resto del mundo. Pero él puede comer lo que le apetezca, pero lo que no me parece bien es que su hijo no pueda disfrutar de las cosas que al resto de los niños les encantan. No soy el único de mi pandilla que piensa de la misma forma y por eso cuando vamos de visita a su pueblo al niño siempre le llevamos un montón de chucherías que al padre no le hacen ninguna gracia pero como son cosas que le regalamos nosotros no le queda más remedio que dejar al niño que disfrute un poco. Cuando nosotros éramos pequeños no nos decían que no podíamos comer chocolate porque tenía no sé qué estabilizador o que se yo.

 

Hace tiempo que no veo al hijo de mi amigo, y le he preguntado estas navidades por él y ya me dijo que el niño ya está más alto que yo, cosa que no es que sea demasiado difícil. Voy a tener que pasarme por el pueblo este invierno a ver a la familia, que salvo mi amigo al resto no les veo desde hace unos tres años. Además si me acerco hasta allí es bastante probable que vayamos a esquiar, que a esquiar sí que hace más de diez años que no puedo ir, espero que este sea el año en el que vuelva a esquiar.